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por Monike de Motas, periodista independiente

En una zona sureña cercana a la Sierra Maestra y perteneciente a Manzanillo, se encuentra un pequeño pueblito costero llamado Campechuela, cuya poblacion se caracteriza por su historica y tradicional rebeldia.

Dicen los campechueleros que el señor presidente ha dejado de pasar por alli cuando visita la provincia Granma, porque en su ultima estancia fue recibido con gritos hambrientos y manifestaciones hostiles, tan multitudinarias que fue imposible reprimirlas.

Ahora, pobres y mas hambrientos que nunca, sus pescadores deportivos pasan dias en el mar para llevar al sitio grandes cantidades de unos pescadillos parecidos a la sardina que contribuyen a mermar la miseria del lugar, pues nutren con alguna escasa proteina las mesas pueblerinas, y resultan muy asequibles al bolsillo por su precio de tres por un peso.

Pero muy recientemente, comenzo a suceder que la policia de la region comenzo a hostigarlos violentamente, acechando a los pescadores para decomisarles la carga, llegando por ultimo a prohibirles la actividad, tras lo cual las medidas represivas se agudizaron.

Siendo una zona de profundo arraigo catolico, los infelices feligreses elevaron sus quejas y disgustos al parroco del pueblo, el cual, observando la masividad y el abuso que se estaba cometiendo, acudio indignado a protestar antes las autoridades policiales, quienes les explicaron sencillamente que asi debia ser, porque se estaban enriqueciendo con ese negocio.

¡Enriqueciendo con la venta a tres por un peso, teniendo que pagar al estado altas sumas por la licencia de pesca y dejar parte de la carga para el alimento de sus familias!

No conforme con su gestion inicial y muchos menos con la respuesta recibida, este representante de la iglesia continuo cada vez mas energeticamente con sus quejas hasta que, despues de un gran escandalo, el partido zonal tomo cartas en el asunto y ordeno que dejaran en paz a los pescadores.

El ejemplo dado por el parroco de Campechuela ha sentado un digno precedente: la iglesia si puede defender los derechos de sus feligreses y salir airosa en su justiciero empeño.

"Solo la opresion debe temer al pleno ejercicio de las libertades"
"Only oppression should fear the full exercise of freedom."<BR>

                         Jose Marti 

 

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